Cuando la chapa (pintada y sin pintar) requiere un laminado o un revestimiento, la adherencia es una cuestión importante.
En particular, en la producción de paneles sándwich, la chapa se trata con corona para mejorar la adhesión de la espuma. También cuando se utilizan espumas con un punto de inflamación más alto.
Además, la chapa brillante puede limpiarse con un pretratamiento corona.
A diferencia de las láminas de plástico, en el tratamiento corona de la chapa metálica no se suelen utilizar rodillos de tratamiento, ya que la chapa metálica conectada a tierra es el contraelectrodo.
Esta unidad especial se ha desarrollado en colaboración con uno de los mayores fabricantes de paneles sándwich del mundo, y hay varios en producción a largo plazo con una fiabilidad probada.
los pares de olleres a la entrada y a la salida de la estación definen con precisión la distancia entre la chapa metálica y los electrodos cerámicos, evitando que se dañen por las deformaciones de la chapa.
La unidad está equipada con electrodos cerámicos especiales con núcleos de acero inoxidable para una mayor durabilidad en el proceso mecánico duro. Se puede realizar una protección adicional de los electrodos cerámicos mediante un sistema de apertura rápida. Se puede detectar un empalme mediante una señal de la línea o mediante un rayo láser interrumpido que abre la estación y la vuelve a cerrar después de que haya pasado el empalme.
La extracción optimizada puede evitar que las partículas conductoras de la chapa provoquen fogonazos en los electrodos que puedan provocar daños. Los portaelectrodos disponen de escudos adicionales para evitar que esto ocurra.
Para facilitar la limpieza y el cambio sencillo de los electrodos, la estación se abre fácilmente para acceder a los electrodos de cerámica.
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