Años de experiencia han llevado al desarrollo de esta planta de desactivación enzimática que puede tratar productos vegetales y frutas.
La elección del principio de funcionamiento, de los tipos particulares de intercambiadores de calor utilizados, de las condiciones de trabajo, ha hecho posible la fabricación de una instalación que puede garantizar:
- Excelente calidad del producto tratado
- Desactivación perfecta de las enzimas pectolíticas
- Tiempos de tratamiento muy cortos y, por lo tanto, degradación organoléptica mínima del producto tratado
- Sin riesgo de quemar el producto
- No hay riesgo de atascos en el intercambiador de calor
- Larga autonomía de funcionamiento entre dos lavados sucesivos
Beneficios:
- Circuito de calefacción que funciona a una presión superior a la presión atmosférica, lo que permite alcanzar la temperatura de desactivación enzimática en tiempos muy reducidos y evita la formación de vapores en el circuito que, a su vez, ensuciarían rápidamente la superficie de intercambio térmico.
- Muy alta relación de recirculación que permite calentar el producto tratado en tiempos muy reducidos, manteniendo el contenido de pectinas en el producto y, con ellas, la consistencia y la viscosidad.
- Tiempos de permanencia muy bajos del producto en la planta, lo que se traduce en una enorme reducción de la degradación organoléptica del producto tratado.
- Grandes pasos para el producto en recirculación que evitan, en cualquier caso, el riesgo de atascamiento del circuito de calefacción.
- Muy baja potencia eléctrica instalada y, por tanto, muy bajo consumo de energía.
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