El sistema detector de gases combustibles A12-17 de ATI elimina la necesidad de realizar comprobaciones de respuesta frecuentes con una prueba de gas automática cada 24 horas. El resultado es un sistema detector de gas combustible con un nivel de fiabilidad superior al de cualquier otro sistema detector de gas disponible. Esta verificación diaria de la respuesta del sensor de gas es lo más parecido a un sistema de detección de gas a prueba de fallas que pueda encontrar, con el beneficio adicional de una prueba manual muy reducida.
Los sensores de gas combustible A12-17 se componen de dos elementos sensores combinados, uno activo y otro pasivo. Ambos se calientan eléctricamente y forman dos patas de un circuito de puente de Wheatstone. Cuando el gas combustible entra en contacto con el sensor, el elemento activo cataliza la oxidación del gas, calentando el elemento activo y cambiando su resistencia. El elemento pasivo permanece inalterado, lo que resulta en un cambio en el circuito del puente que es proporcional a la concentración de gas. Mientras el elemento activo permanezca en buenas condiciones, el sensor de gas responderá rápidamente a la presencia de gas combustible.
El sensor de gas Auto-Test es en realidad una combinación de un sensor de gas y un generador electroquímico de gas hidrógeno (patente pendiente) integrado en una carcasa de acero inoxidable a prueba de explosiones. Cuando es activado por el transmisor electrónico, el generador produce hidrógeno que se difunde al sensor de gas a través del arrestallamas que protege al sensor. Si el sensor de gas responde correctamente, el transmisor de gas combustible A12-17 mostrará una indicación de "Pasa". Si el sensor no responde correctamente, se activará un mensaje de "Falla de prueba automática" en el transmisor de gas y la salida de 4-20 mA del transmisor caerá a 3 mA, proporcionando una indicación remota de falla.
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