El pulido químico se realiza sin corriente, lo que significa que no se necesita tiempo y esfuerzo adicionales para el contacto eléctrico y la instalación de los cátodos. La pieza es desbarbada y desgastada mediante la eliminación química en toda su superficie.
Los componentes se montan en bastidores de forma individual o se recogen en cestas y tambores y se sumergen en el baño de pulido.
Este proceso requiere el control del tiempo y la temperatura del baño para garantizar la precisión de la eliminación en los bordes y las superficies dentro de tolerancias muy estrechas.
---