Los detectores de movimiento PIR 30 cuentan con los acreditados infrarrojos pasivos, que detectan de inmediato a las personas y los animales que se encuentran en su campo de detección mediante la diferencia de temperatura y a continuación activan la conmutación.
Uso en puertas giratorias
PIR 30 detecta inmediatamente por su temperatura a las personas y los objetos que se encuentran en su zona de detección y a continuación inicia la rotación de la puerta giratoria.
Seguridad para puertas automáticas, puertas industriales y ascensores
El detector de movimiento pasivo por infrarrojo PIR 30 no emite ninguna radiación por sí mismos. Detecta los objetos que tienen una temperatura superficial diferente a la del entorno. En cuanto se encuentran en la zona de detección del detector de movimiento, su emisión térmica se desvía a los elementos sensores a través de lentes y esta detección activa el proceso de conmutación.
En la tapa frontal hay instaladas 18 lentes de Fresnel, que conforman una alfombra invisible sobre la zona de detección que se puede ajustar de forma precisa y prácticamente como se desee.