Gracias a la gran resistencia química del PTFE y FEP, materiales que entran en contacto con el medio, también pueden trasegarse líquidos que habitualmente atacarían a materiales como el PP o el PVC (excluyendo el flúor básico).
También para el trasiego de líquidos de alta pureza.
La llave de paso evita la salida de vapores peligrosos para la salud y el goteo de líquidos después del trasiego.