Los recipientes compactos tienen una anchura de sólo 6,5 cm o 12,5 cm y resultan ideales para ahorrar espacio.
En un reducido espacio podrá almacenar y trasegar los líquidos más diversos. El bidón compacto también se puede colocar en posición horizontal, p. ej. en frigoríficos. Las nervaduras de refuerzo y las paredes gruesas le confieren gran estabilidad.
Mediante los soportes (solo bidones de 5 l) se pueden formar filas de dos o tres grupos de recipientes para las más variadas combinaciones con total seguridad y estabilidad de montaje. El recipiente compacto también resulta óptimo para el uso como recipiente de laboratorio.