La cadena de medición de fuerza se ha desarrollado para aplicaciones en las que los requisitos de precisión no son lo primordial, sino que los criterios clave son un precio de compra económico y una funcionalidad sencilla. La tecnología de galgas extensométricas del sensor permite medir tanto fuerzas estáticas como fuerzas que cambian dinámicamente. La gran pantalla permite leer fácilmente la fuerza que actúa sobre el sensor. Los cuatro orificios roscados integrados permiten integrar el sensor de forma rápida y sencilla en los equipos de producción y montaje existentes.
Las aplicaciones típicas incluyen
Pruebas de resistencia de uniones soldadas
Medicina deportiva
Control de la fuerza de apriete de conexiones de mangueras
El cuerpo del sensor es un disco cilíndrico plano, en el que está integrado un pomo abombado de aplicación de fuerza. Es importante que la fuerza se aplique axialmente al centro del sensor.
Como elemento de medición dentro del sensor se utiliza una galga extensométrica de puente completo, mediante la cual la fuerza a medir se convierte en una tensión eléctrica proporcional. Ésta se indica como fuerza en la pantalla.
Este indicador digital extremadamente económico se ha podido realizar utilizando la tecnología de microprocesadores más moderna. No es necesario explicar la sencillez de funcionamiento y ajuste. Las abreviaturas autoexplicativas permiten incluso a un usuario inexperto configurar el dispositivo en muy poco tiempo.
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