En el comercio desde 1980, el Samario de Cobalto ha sido el primer material magnético a revolucionar las prestaciones de los motores eléctricos.
De hecho, hace posible un flujo magnético aproximadamente 5 veces superior respecto a los materiales tradicionales como la ferrita o el alnico. No necesita de ningún revestimiento protectivo porque, a diferencia del neodimio, no tiende a oxidarse.
La formula base del samario de cobalto utiliza mucho cobalto puro y por este motivo el precio de este producto es particularmente alto. Además, el samario de cobalto es muy frágil pero tiene la característica positiva de resistir a temperaturas de hasta los 250°C sin sufrir significativas variaciones de potencia y es por este motivo que después de la llegada del Neodimio ha continuado a ser utilizado por mucho tiempo.
Con la aparición de las nuevas gradaciones de neodimio resistentes a las altas temperaturas, el samario de cobalto ha sido siempre menos solicitado por la clientela mundial que prefería usar el neodimio por una razón de coste netamente más conveniente.