Los hornos de carga inferior de la serie HTBL operan a una temperatura máxima de 2200 °C o 3000 °C (bajo demanda). Los modelos con aislamiento de grafito se ofrecen con volúmenes de 50, 80 y 200 litros.
Una clara ventaja de los hornos HTBL es la facilidad con que se realiza la carga/descarga de la muestra. Una vez que la solera ha descendido, la muestra queda accesible por todos lados sin ningún tipo de limitación facilitando enormemente el acceso a la misma y haciendo de estos hornos unos aparatos muy fáciles de operar e ideales para el tratamiento de muestras difíciles. Estos ofrecen igualmente la posibilidad de insertar un termopar dentro de la cámara para un mejor control de la temperatura, así como de usar una retorta. El movimiento vertical de la solera es realizado por un brazo hidráulico de forma completamente automática. Una vez que la solera ha descendido hasta el punto más bajo, el usuario puede extraerla manualmente con un movimiento rotatorio en un ángulo de 90°.
Como gases de trabajo pueden emplearse el nitrógeno, argón e hidrógeno, en mezclas o en su forma pura. Otros gases bajo demanda. Los gases pueden emplearse con ligera sobrepresión o presión parcial controlada para generar un flujo de gas definido. La operación con atmósfera de aire no es posible.
Los gases son regulados por varios dispositivos de dosificación y control. Para la generación del vacío se ofrecen estaciones de bombeo personalizadas según las necesidades individuales. La temperatura puede controlarse individualmente garantizando una uniformidad excelente.