La centrifugadora como componente central de un sistema.
Todas las centrifugadoras automáticas necesitan una periferia perfecta para funcionar con la máxima eficacia. Todos los elementos de un sistema se eligen teniendo en cuenta el tipo de viruta que se encuentra, para ofrecer unos resultados óptimos.
En un sistema automático, sólo se procesan virutas de un tipo de metal, ya que de lo contrario el lote se contaminaría. El FLEXOMAT de CEPA o varios sistemas automáticos son una buena solución para desaceitar varios tipos de metal, en función de las cantidades encontradas. El dispositivo central del sistema, la centrifugadora, se elige en función del tipo, la cantidad y la forma de las virutas.
Componentes del sistema en funcionamiento automático
Para su planificación, CEPA no sólo tiene en cuenta la situación actual, sino también posibles escenarios futuros: en colaboración con usted, creamos un sistema preparado para el futuro que le servirá de forma fiable durante muchos años. Una vez que se ha decidido por un tipo concreto de centrífuga, se planifican los componentes de la instalación. Además de la propia centrifugadora, se incluyen dispositivos de elevación e inclinación, trituradoras y cintas transportadoras de alimentación y descarga. Estos componentes se eligen en función de las necesidades, para ofrecerle siempre la mejor solución.
Entrega de las virutas, los lodos o el material de trituración: las virutas se recogen en carros de virutas en la máquina de procesamiento y se llevan al sistema. Un dispositivo de elevación e inclinación las introduce en el transportador de alimentación. Alternativamente, el transportador puede cargarse directamente en la máquina de procesamiento.
La centrifugadora se alimenta continuamente mediante un transportador o un tornillo. Si es necesario procesar virutas largas, debe instalarse una trituradora antes de la centrifugadora para acortar las virutas y hacerlas vertibles antes de que lleguen al sistema.
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