Ceramicx proporciona soluciones de control personalizadas para adaptarse a aplicaciones específicas de calentamiento de hornos. Estas soluciones pueden variar en tamaño, desde simples sistemas de bucle abierto de una sola zona hasta grandes y complejas instalaciones multizona con retroalimentación de temperatura y control de bucle cerrado.
El objetivo en la mayoría de las aplicaciones de calentamiento de procesos es adaptar la carga de calentamiento instalada a las necesidades de calor de proceso en la medida de lo posible. Por lo general, las necesidades de energía se sobreestiman para asegurar que siempre haya una capacidad adecuada para permitir variaciones en el proceso y, en algunos casos, para proporcionar una respuesta térmica rápida. Por esta razón, el control puede ser crítico. La capacidad de controlar la producción de energía térmica según las necesidades permite optimizar el proceso de calentamiento. En todas las aplicaciones de transferencia de calor radiante hay un límite a la cantidad de energía que puede ser absorbida por el objetivo durante un período de tiempo específico. La fabricación moderna requiere tiempos de proceso cortos con un uso mínimo de energía. La aplicación de calor excesivo introduce el riesgo de quemaduras superficiales, por lo que es fundamental que la salida del calentador se pueda ajustar para proporcionar velocidad de proceso y resultados de alta calidad.
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