Alta Frecuencia + Alta Eficiencia = Alto Rendimiento
Todas nuestras fuentes de alimentación son capaces de funcionar a frecuencias de hasta 40 kHz, ofreciendo importantes ventajas sobre los sistemas de baja frecuencia:
Tamaño compacto: Para alcanzar una potencia de salida determinada, nuestros sistemas de alta frecuencia requieren menos kVA de salida que los sistemas de baja frecuencia. Esto se traduce en una mayor eficiencia en el transformador de alto voltaje de salida y un menor tamaño general para todo el sistema.
Vida útil dieléctrica más larga: Una frecuencia más alta reduce los picos de tensión en el electrodo, lo que resulta en una menor tensión sobre el material dieléctrico enlazado al rodillo de tratamiento (o al electrodo en sistemas de rodillo desnudo).
Producto de mayor calidad: La alta frecuencia genera voltajes más bajos a través del material tratado, reduciendo la acumulación estática y el tratamiento inconsistente debido a que el material se arruga o se levanta del rodillo. Las bandas metalizadas son menos propensas al pinholing y al "soplado" de metales cuando se tratan con nuestros sistemas de baja tensión y alta frecuencia.
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