Disipador térmico para LED

de aluminioextruidode potencia

Los LED energéticamente eficientes, ecológicos y duraderos son el tipo de fuente de luz más común hoy en día. Iluminan boutiques, tiendas de alimentación, hoteles, barcos, edificios de oficinas, iglesias, museos, coches, calles, autobuses y trenes, y muchos otros ámbitos de la vida cotidiana. Y aunque los LED son mucho más eficientes que las bombillas convencionales, los diodos emisores de luz también convierten entre el 75% y el 85% de la potencia absorbida en calor, según el color y la intensidad luminosa. Este calor se disipa desde la capa de barrera a través de las conexiones metálicas a la placa de circuito impreso y de ahí al medio ambiente. La temperatura en la capa de barrera también afecta a la longitud de onda dominante y al brillo del LED y, por tanto, al color de la luz. Por tanto, la luminosidad de la lámpara disminuye a medida que aumenta la temperatura, y el color también cambia. Por lo tanto, una gestión térmica eficaz con disipadores de calor LED diseñados para la aplicación concreta es esencial para garantizar una eficacia luminosa y un color constantes del LED, así como una larga vida útil. Disipadores especiales para aplicaciones especiales Cada aplicación tiene unos requisitos diferentes en cuanto al tipo de LED y su refrigeración. En el caso de las luces LED pequeñas con un consumo de energía en el rango de los milivatios, las conexiones soldadas son suficientes para disipar el calor del cristal semiconductor. Un consumo de aproximadamente un vatio o más ya requiere el uso de refrigeración (pasiva). Los diodos emisores de luz de alta potencia que funcionan con un amperaje superior a 20 miliamperios producen tanto calor que incluso requieren disipadores de calor LED con ventilación forzada (refrigeración activa).