Para evitar desde un principio los choques en la parte inferior del la puerta, donde tienen lugar casi el 90% de las colisiones, con nuestros resguardos fotoeléctricos de infrarrojos EFA-TLG® comprobados por el organismo TÜV apostará sobre seguro. El sistema es único en el mundo y cuenta con un dispositivo de autovogilancia. lo montamos directamente en las guías laterales de la puerta, para que esté bien protegido. EFA-TLG® controla la zona de cierre de la puerta hasta en una altura de 2,5 metros. Los rayos infrarrojos que se cruzan generan una barrera fotoeléctrica casi plana, que puede captar hasta el más pequeño obstáculo sin tocarlo. Si hay algo en el camino, el movimiento de cierre se detiene inmediatamente o ni siquiera se inicia. Esta técnica única protege a las personas, la puerta, los vehículos y el material.