Los detectores infrarrojos EGE se utilizan para detectar objetos calientes y para registrar y medir las temperaturas. Los sensores detectan la radiación infrarroja de los objetos calientes y de 20° C a 800 ° C. Los detectores infrarrojos EGE están diseñados para su uso en condiciones extremas. Con su carcasa de vidrio y acero inoxidable son estancos según IP 68 / IP 69. Con las ópticas de fijación se pueden utilizar a una temperatura ambiente de hasta 500 ° C. Un sistema opcional de soplado hace que los sensores sean insensibles a la contaminación de la óptica. Los detectores se utilizan, por ejemplo, para detectar vigas de acero o alambre laminado en caliente, así como para el control de la temperatura sin contacto de la cebada cervecera en tanques de germinación.
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