La prueba de dureza con lápiz, a la que también se hace referencia como la prueba de Wolff-Wilborn, utiliza los valores variables de dureza de lápices de grafito para evaluar la dureza de un revestimiento.
El Elcometer 501 ha sido diseñado para asegurarse que la mina del lápiz cilíndrico se mantiene a un ángulo constante de 45° y ejerce una fuerza de 7,5N (1,68lbF).
La mina de lápiz, afilada previamente mediante el sacapuntas especial y el papel abrasivo, se introduce en el Elcometer 501 y se empuja sobre la superficie revestida plana y suave. El valor de dureza más bajo del lápiz que marca el revestimiento determina la calificación de dureza del revestimiento.