La reducción activa de microorganismos con radiación ultravioleta se desencadena mediante reacciones fotoquímicas en el ácido nucleico de los microorganismos sin necesidad de añadir sustancias extrañas. La modificación asociada del ADN impide la división celular de los microorganismos, lo que significa que ya no pueden multiplicarse y, por tanto, ya no son perjudiciales para la salud. Además de sistemas UV con una longitud de onda de 254 nm para la desinfección y la reducción de ozono, también suministramos sistemas con una longitud de onda de 185 nm, utilizados para degradar componentes orgánicos.
- Conforme a las cGMP
- Fabricados en acero inoxidable 316L con construcción sin espacios muertos
- Sensor DVGW (Asociación alemana para aplicaciones de gas y agua)
- Conexiones asépticas según DIN 11864
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