Las averías en las líneas, los fenómenos atmosféricos, las continuas variaciones de carga y los disturbios generados por los mismos usuarios, no permiten garantizar a cada dispositivo una tensión constante que se encuentre dentro del margen de tolerancia previsto por los contratos de suministro. A menudo, esa tolerancia es insuficiente para los dispositivos más sensibles. Otras veces, la tensión de red alcanza niveles que superan un 15, un 20 y hasta un 30% el valor nominal previsto.
Las fluctuaciones de tensión son fenómenos de disturbio particularmente insidiosos, ya que no son evidentes y sólo se pueden detectar mediante el uso de instrumental específico. En su presencia, los dispositivos eléctricos aparentemente conservan un estado de correcto funcionamiento que a veces oculta graves problemas, en ciertas ocasiones irreparables.
La gama de estabilizadores electrodinámicos de tensión “ERESTAB” constituye la solución fiable, ensayada y económica para los perjuicios provocados por las fluctuaciones de tensión. El uso de estos equipos es una verdadera inversión, porque eliminar los problemas de servicio significa disminuir los costes y aumentar la productividad.
Se ofrecen en versiones monofásica (hasta 350 kVAs) y trifásica (hasta 4200 kVAs), y diferentes grados de protección IP. Los modelos trifásicos pueden tener la regulación en la media de las tres fases (Modelos T) ó regulación independiente por fase (Modelos Y).