El requisito de dividir una corriente de lodo para alimentar dos o más unidades paralelas -y hacerlo de manera uniforme y fiable- ha sido un problema a lo largo de la historia de la molienda. Diversos distribuidores por gravedad, presurizados y motorizados han abordado este problema con un éxito limitado. Los botes de gravedad y a presión son notoriamente poco fiables: la precisión de la distribución de la alimentación siempre está en duda. Y la distribución empeora aún más cuando una o más salidas están fuera de línea. Los distribuidores rotativos motorizados hacen el trabajo, pero a costa de un elevado mantenimiento.
Las ventajas del RSP incluyen
Modesto coste de capital
Coste de mantenimiento muy bajo
División de la alimentación muy precisa
Funcionamiento fiable y sin problemas
Accionamiento por lodos - sin motores
El exclusivo lavador interno proporciona
Mejor distribución cuando una o más salidas están fuera de línea
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