La división del área de trabajo controlada por software permite el funcionamiento del sistema láser en lados alternos. Esto permite que la operación continúe en el lado opuesto, mientras se hace la remoción y descarga del material.
La ventaja consiste en cortar o grabar el material colocado en la parte delantera, mientras que el operador descarga las piezas acabadas y carga directamente en la superficie de la mesa (en la parte trasera). El láser cambia automáticamente entre las dos zonas de procesamiento, manteniendo el láser en funcionamiento casi el 100 por ciento.