Focke Meler sigue añadiendo novedades a su gama de rodillos de laminación.
Se trata de un rodillo con una anchura de laminación de 1200 mm, el cual
incorpora algunas mejoras con respecto a modelos anteriores, como un panel
táctil, la reducción del tamaño del depósito y grandes ventajas en cuanto a su
ergonomía.
La intuitiva pantalla táctil permite al usuario programar el funcionamiento y
control de la máquina y cuenta con dos modos de trabajo: modo continuo y
modo retorno, este último empleado para aplicar adhesivo en materiales de
menor grosor.
El depósito de adhesivo sigue contando con una válvula de inyección de aire
seco para evitar la reticulación del adhesivo y se ha reducido en tamaño con
objeto de mantener intactas las propiedades del mismo y facilitar su limpieza.
El sistema cuenta también con una bandeja que efectúa un cierre hermético
con el rodillo de aplicación para recoger los restos de adhesivo. Al igual que en
el depósito, esta bandeja cuenta con un sistema de inyección de aire seco para
evitar una limpieza diaria del tanque.
La compañía busca siempre la máxima ergonomía en sus productos, y este, en
concreto, ofrece al usuario un fácil acceso a todas las zonas de la máquina y
un diseño de la estructura y posición de las mesas que permiten realizar el
mantenimiento del equipo de una manera sencilla.
Focke Meler cuenta con una amplia gama de rodillos y ofrece al cliente la
posibilidad de configurar la anchura de laminación según sus necesidades. De
esta manera, el rodillo se adapta perfectamente a cada aplicación
contribuyendo a optimizar la producción y a garantizar su calidad.