Aseguran un rendimiento óptimo del motor minimizando el consumo de combustible y las emisiones de CO2, NOx y PM.
CÓMO FUNCIONA
El encendido de los motores diésel se produce por compresión. Cuando el aire altamente presurizado dentro del cilindro alcanza una cierta temperatura, la mezcla de combustible y aire se enciende. Durante este proceso, los inyectores son extremadamente importantes, ya que el pedal del acelerador acciona la bomba de inyección o la unidad de control eléctrico, con lo que altera el volumen del combustible que se introduce en los cilindros en forma de chorros atomizados. Así, se garantiza la potencia óptima a todas las velocidades.
Desde su introducción, los sistemas diésel se han ido actualizando constantemente: la tecnología se ha concentrado especialmente en sistemas que permiten que se genere una mezcla cada vez más eficiente de combustible y aire.
Una mayor atención a las cuestiones ambientales requiere verificaciones regulares de las emisiones de gases de escape. Los motores FPT siempre han contado con los sistemas de inyección más avanzados, que cumplen con las estrictas normas europeas en materia de contaminación del aire, manteniendo al mismo tiempo un rendimiento óptimo en todas las condiciones.
Los principales componentes del sistema de inyección utilizados en los motores FPT son inyectores con boquilla de combustible, inyectores bomba e inyectores electrónicos. Estos últimos se accionan mediante una unidad de control electrónico que monitorea el líquido refrigerante y la temperatura del aire del motor, y recibe las señales enviadas por los sensores del vehículo ubicados en el pedal del acelerador, los frenos, el embrague y el velocímetro.