Este modelo, único en el mercado, es un cilindro de doble efecto con multiplicación de fuerza en su interior. Para su funcionamiento, necesita ser alimentado con un aceite a 70 bar de presión. Con su multiplicador interior, transforma esa presión inicial en una fuerza de amarre de 5000 kg. Además, tiene un recorrido automático de cierre y abertura de 4 mm. Estas dos ventajas, presión de entrada de tan sólo 70 bar y recorrido automático, hacen este husillo idóneo para trabajar en centros de mecanizado horizontales y verticales que dispongan de un grupo de alimentación para amarres hidráulicos. Además, es corto en longitud y su funcionamiento es sencillo. Por medio de la manilla, se coloca el carro móvil a tres o cuatro milímetros de la pieza a amarrar y, a continuación, por medio de una válvula manual o de una electro válvula comandada por el CNC de la máquina, se puede amarrar con alta presión. Gracias a ello, es capaz de trabajar con procesos robotizados.