Siempre que sea necesario controlar gases tóxicos, oxígeno o hidrógeno, el transmisor EC28 combinado con uno de los fiables controladores de GfG es una solución perfecta y rentable. Este transmisor con certificación ATEX garantiza un uso seguro, incluso en atmósferas potencialmente explosivas.
Seguridad funcional
El hardware del EC28 cumple la norma europea de seguridad funcional DIN EN 61508-2: 2011 para muchos gases. Los niveles de SI (hasta SIL3) en uso monocanal (1oo1) o redundante (1oo2) dependen del tipo de gas y del sensor.
Comunicación y servicio
La comunicación del EC28 funciona a base de señales de 4-20 mA. La tecnología Smart Sensor permite sustituir los sensores de forma rápida y sencilla y el mando a distancia RC2 puede utilizarse para realizar ajustes (calibración por una sola persona).
Mando a distancia RC2 (opcional)
Los gases como el amoníaco y el hidrógeno son más ligeros que el aire. Por ello, los transmisores que los detectan se instalan cerca del techo. Para facilitar las tareas de servicio y mantenimiento, pueden equiparse con un cable instalado de forma permanente que puede conectarse a un mando a distancia RC2. Esto permite acceder al transmisor desde el suelo en todo momento, lo que facilita considerablemente las tareas de inspección, calibración o mantenimiento.
Medición fiable y costes de funcionamiento mínimos
El sensor y la compensación de temperatura integrada garantizan una gran precisión de medición. La larga vida útil del sensor y los reducidos requisitos de mantenimiento garantizan unos costes de funcionamiento mínimos.
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