Los motores eléctricos no sólo deben ser muy eficientes, sino también resistir condiciones ambientales adversas y funcionar con fiabilidad durante toda la vida útil de un vehículo. Dependiendo de la aplicación, estos motores también deben ser controlables en su potencia de salida o permanecer en modo de reposo hasta que sean "despertados" por órdenes del sistema de bus del vehículo.
Los fabricantes y proveedores abastecen a un mercado mundial con aplicaciones en un rango de temperaturas que va desde los -40 °C hasta bastante más de 70 °C y con una humedad enorme. Estas condiciones climáticas, a veces extremas, deben simularse durante varias semanas o meses durante la validación de los motores en pruebas de resistencia.
CARMEN ejecuta repetidamente los escenarios de carga mencionados en condiciones climáticas durante un periodo de tiempo muy largo y controla así los límites parametrizados. En una prueba de selección o muestreo aleatorio, se comprueba la fatiga y el desgaste de los componentes mediante pruebas de carga, por ejemplo, bajo cambios de presión y temperatura.
Aplicaciones
Estos sistemas de ensayo de resistencia CARMEN están diseñados de tal forma que se garantiza un registro sin huecos y sincronizado en el tiempo de todos los datos de medición durante un largo periodo de tiempo y permite su posterior análisis. Por razones de tiempo, en los ensayos de resistencia deben ensayarse normalmente varios objetos de ensayo simultáneamente (hasta 4 canales). Por ello, CARMEN controla varias secciones de ensayo en paralelo y registra o protocoliza los resultados.
Dado que no todos los rangos de trabajo, desde el ralentí hasta el bloqueo, deben controlarse normalmente de forma dinámica y sin lagunas en la prueba de resistencia, también pueden implementarse aquí frenos de histéresis más sencillos, frenos fijados mecánicamente o incluso sistemas sin unidad de carga.
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