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Los SAI industriales de exterior para entornos difíciles son una categoría creciente de sistemas SAI diseñados para soportar las tensiones de un entorno industrial. Debido a la escasez de espacio en los centros de datos y otras zonas de clima controlado, cada vez más sistemas SAI funcionan en entornos difíciles que pueden incluir vibraciones, polvo y salpicaduras de líquidos. Estas duras condiciones pueden afectar a la vida útil de los equipos SAI normales y provocar fallos inesperados. Pero los SAI de exterior Hannibal para entornos difíciles tienen componentes, baterías y carcasas que pueden hacer frente a esos retos. Algunas aplicaciones industriales, como un almacén o una planta de fabricación, pueden exponer el SAI a suciedad, polvo, residuos y grandes oscilaciones de temperatura. En estas duras condiciones, un fallo puede ser aún más difícil de reparar, y un suministro eléctrico ininterrumpido aún más crítico, por lo que es importante instalar un SAI especialmente diseñado para funcionar en entornos difíciles. Los sistemas SAI para exteriores son fuentes de alimentación de reserva robustas diseñadas para aplicaciones de control de accesos, seguridad, servicios públicos y telecomunicaciones, la mayoría de las cuales se encuentran en ubicaciones exteriores difíciles. Estos sistemas SAI están diseñados a medida para proporcionar una alimentación de reserva limpia e ininterrumpida y proteger equipos electrónicos sensibles en climas adversos. Cada componente de estos sistemas contribuye a su resistencia, fiabilidad y funcionalidad. Un amplio rango de temperaturas de funcionamiento Los armarios de baterías adicionales opcionales proporcionan tiempos de respaldo más prolongados Estos sistemas SAI tienen carcasas estándar u opcionales, están homologados para exteriores, se presentan en una amplia gama de tamaños y tienen muchas opciones disponibles, como sensores ambientales.