Los cuerpos negros que operan en condiciones de vacío combinan la función de las fuentes infrarrojas de referencia tradicionales con características específicas que les permiten funcionar en una cámara de vacío a temperaturas criogénicas o ambientales. Pueden emitir en un amplio rango de temperatura, ajustado y controlado con la mayor precisión.
El cabezal emisivo compatible con entornos al vacío está conectado a un controlador ubicado fuera de la cámara. La elevada estabilidad de la regulación queda garantizada gracias al control optimizado de pérdidas a través de la radiación y la conducción.
La elevada emisividad de hasta 0.999 se obtiene gracias al revestimiento compatible con entornos al vacío sobre una estructura superficial específica del cuerpo negro. La temperatura de la superficie emisiva se mide en tiempo real gracias a sensores PT calibrados de alta precisión.
Están disponibles varios principios de intercambios térmicos para responder a diferentes aplicaciones, como la caracterización y la calibración radiométrica de imaginadores espaciales, la corrección de la falta de uniformidad de sensores infrarrojos, etc.