Instalación de biomasa

El concepto de central eléctrica está probado, es fiable y fácil de manejar. El vapor sobrecalentado de la planta de tratamiento de residuos acciona una turbina de vapor conectada a un generador. Una pequeña parte de la energía eléctrica producida por el generador se utiliza para la propia planta, lo que le permite funcionar de forma autosuficiente. El resto puede alimentar una red pública o ser utilizado por otras instalaciones industriales in situ, por ejemplo, la conversión de energía en gas (mejora del gas), la conversión de energía en agua (desalinización) u otras aplicaciones. La eficiencia neta global de una planta que sólo produce energía eléctrica se sitúa en torno al 35%.