El ACM fue el primer molino clasificador que salió al mercado en 1962. Desde entonces, se ha desarrollado continuamente y se ha adaptado a las necesidades cambiantes del mercado. Con más de 1000 referencias en todo el mundo, se utiliza en todas las industrias:
Química: Bisfenol, ácido tartárico, E-PVC, fungicidas, herbicidas, estearatos
Recubrimiento de polvo: Epoxi, poliéster, híbridos, acrilatos de curado UV, poliamida
Alimentaria: Azúcar, cacao, almidón, harina de pescado, goma xantana, goma guar, lactosa
Farmacéutica / cosmética: Polvo facial, ácido ascórbico, ácido tartárico
Minerales: Talco, caolín, sulfato de calcio, bauxita, piedra caliza