Los filtros rápidos son sistemas que funcionan bajo presión. Se componen de una cubierta de acero galvanizado o adecuadamente pintado o de fibra de vidrio con válvulas y tuberías de unión, manómetros y accesorios para su correcto funcionamiento.
Sistema de coperación automática: una unidad de programa controla automáticamente las válvulas de corte que se activan neumática o hidráulicamente. El final del ciclo de funcionamiento y la puesta en marcha del proceso de lavado se fijan generalmente a una hora determinada o con un manómetro diferencial.
Sistema de funcionamiento manual: un técnico realiza manualmente todo el proceso de lavado interviniendo sobre las válvulas suministradas con el filtro, tal y como se indica en el manual de instrucciones.
Los filtros a presión son
El filtro clarificador es un filtro a presión que se utiliza para eliminar la turbidez del agua. El relleno se compone de arena filtrante y arena de sustrato. La granulometría de la arena puede variar según el uso específico del filtro
Filtros neutralizadores: Estos filtros se utilizan para neutralizar el pH del agua. El material filtrante es un compuesto natural que reacciona con el agua que contiene dióxido de carbono libre, formando así un compuesto estable y elevando el pH a valores neutros
Filtros desferrizantes: Un filtro desferrizante se utiliza para eliminar el hierro y el manganeso mediante una carga de materia catalizadora que los hace reaccionar, de manera que se eliminan del agua que se trata.
Filtros de C.A.G: Un filtro de carbón activado granular se utiliza para la decloración y la absorción de cualquier compuesto orgánico presente en el agua que se está tratando. Se pueden realizar otras aplicaciones, como la eliminación de microcontaminantes orgánicos como pesticidas o disolventes clorados.
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