A la salida del horno, un transportador de despegue transfiere el producto desde la malla o banda del horno hacia el transportador de enfriamiento. Para un enfriamiento eficaz esto es largo, una vez y media o dos veces la longitud del horno, en la sala de ambiente; considerado desde la más sofisticada tecnología de alimentos como necesario para una adecuada y duradera conservación del producto envasado. La cinta transportadora puede ser de malla metálica o de plástico de alta resistencia, con seguimiento automático para evitar cualquier deslizamiento lateral. Se puede conseguir una refrigeración forzada, posible para reducir la longitud del transportador, ya sea en sala climatizada, ya sea mediante campanas con conductos de aire soplados por ventilador centrífugo o mediante ventiladores instalados en la parte final del transportador.
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