Las granalladoras para la desincrustación de bobinas están diseñadas para limpiar toda la superficie de las bobinas metálicas en flujo continuo. La cámara está fabricada con chapas de acero al manganeso y recubierta interiormente por placas de protección de acero de alta resistencia al desgaste. Para alcanzar el ritmo de producción adecuado, la cámara está equipada con ruedas de granallado con motores de alta potencia (hasta 110 kW). La instalación puede equiparse con módulos secuenciales, cada uno de ellos con un sistema de recirculación de granalla específico. En la mayoría de los casos, esta máquina se integra en una línea de procesamiento completa en la que la bobina es transferida por una unidad de accionamiento externa.
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