Son unas bolsas desecantes para proteger la mercancía de la humedad durante el transporte en contenedores. El desecante está compuesto de arcilla natural y cloruro cálcico. En condiciones normales, se aconseja poner 1 kg. por pié, es decir, 20 kg. para contenedores de 20’ y 40 kg. para contenedores de 40’. Las bolsas desecantes han de ponerse uniformemente repartidas dentro del contenedor.