Estación de levantamiento para aguas residuales Hebefix 200 series

estación de levantamiento para aguas residuales
estación de levantamiento para aguas residuales
Añadir a mis favoritos
Añadir al comparador
 

Descripción

Unidad simple o dúplex Cubierta inodora Sistema de raíles guía GR 32 o GR 50 posible El Hebefix 200 está disponible para un mayor volumen de aguas residuales domésticas y una mayor capacidad de almacenamiento. Sin necesidad de grandes obras, elimina las aguas residuales domésticas de lavanderías, almacenes o sótanos. El Hebefix 200 puede instalarse como sistema simple o dúplex. Los componentes necesarios para la instalación de la bomba forman parte del volumen de suministro. El sistema dúplex proporciona una mayor seguridad en la evacuación de aguas residuales. En funcionamiento normal, las dos bombas funcionan alternativamente o al mismo tiempo para hacer frente a los picos de carga. La unidad de control hace funcionar el sistema dúplex en función del tipo de bomba (véanse los accesorios). Si el sistema va a funcionar como sistema único, debe seleccionarse una bomba con control de nivel incorporado. La bomba a colocar puede seleccionarse en función de la cantidad de agua sucia. Hay que tener especialmente en cuenta el agua sucia que se va a transportar y la potencia de bombeo necesaria. En caso de agua poco sucia, se pueden utilizar las bombas U3K, U5K así como U6K E+D. Si los aditivos son mayores o el volumen de agua residual es mayor, es recomendable utilizar una bomba de la serie US. Las bombas US 73+103 Ex se utilizan en zonas peligrosas. En caso de aplicaciones comerciales, debe comprobarse previamente la resistencia de los materiales. Dependiendo del tipo de bomba utilizada, debe elegirse la Hebefix 200-32 con ramal de descarga de 1¼" o la Hebefix 200-50 con ramal de descarga de 2". La unidad cumple las especificaciones de la norma alemana/europea EN 12050.

---

VÍDEO

Catálogos

No hay ningún catálogo disponible para este producto.

Ver todos los catálogos de JUNG PUMPEN
* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.