Los registradores de datos tienen un diámetro de tan solo 16 mm y se utilizan en espacios reducidos. Gracias a la larga vida útil de la batería, el nivel o la presión del agua y la temperatura se pueden grabar durante años (hasta cuatro años si se realiza una medición cada hora). Con el software facilitado es posible configurar el registrador (intervalo de medición, control de eventos, inicio retardado de la medición, etc.) y los datos leídos pueden representarse cómodamente de forma gráfica, corregirse con valores de presión atmosférica, convertirse a niveles de llenado o a otras unidades y exportarse.