En una planta MBT (tratamiento mecánico-biológico), los flujos de residuos mezclados se tratan por medios mecánicos como la trituración, el cribado y la separación, así como mediante procesos biológicos.
Al inicio del tratamiento, los residuos se abren mediante una pretrituradora. Si es necesario, se puede realizar una preclasificación previa.
Tras la trituración, una criba de tambor separa la fracción orgánica.
Los materiales reciclables se separan de la fracción de gran tamaño mediante clasificación, separación magnética y tamizado por viento. La fracción restante de alto contenido calórico puede utilizarse para fabricar combustible.
Los orgánicos se compostan en túneles cerrados y/o hileras, con volteadores para la aireación.
Tras el cribado y la preparación fina para eliminar los contrarios, el compost está listo para su uso.
Comenzar con la trituración
El proceso comienza con una trituradora Terminator, con un rendimiento de trituración configurado para el material de entrada. El objetivo de este paso es homogeneizar el flujo de entrada y abrir bolsas y paquetes. La resistencia contraria de la trituradora le permite aceptar una amplia gama de materiales de entrada, mientras que la alimentación uniforme garantiza un suministro constante de material triturado a las fases posteriores del proceso.
Separación de orgánicos
Dado que el mayor contenido orgánico se encuentra en la fracción fina, el cribado es el primer paso tras la trituración. La fracción orgánica resultante se envía a la preparación biológica. La máquina utilizada es una criba de tambor Komptech estacionaria o la criba de discos Flowerdisc.
Otras etapas de reciclado
La fracción de gran tamaño se somete a cribado y separación para generar diversos tipos de CDR y fracciones de reciclado.
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