Con la mayor superficie de cribado para su longitud total, la Cribus 2800 marca la pauta en la clase compacta. Su tambor de gran diámetro mejora el rendimiento de cribado, y la generosa separación entre el tambor y las paredes laterales garantiza un cribado sin problemas incluso para tamaños gruesos.
Esto abre un amplio abanico de aplicaciones, en las que la Cribus brilla por su facilidad de manejo y su gran rentabilidad. Una de las razones es el sistema de accionamiento orientado al futuro: Todo en la Cribus se acciona eléctricamente, desde la tolva hasta las cintas de descarga.
MAYOR RENDIMIENTO
A pesar de tener sólo 10,6 metros de longitud, la Cribus 2800 cuenta con una superficie de cribado de 28 m², la mayor de su clase. Esto es posible gracias al gran diámetro del tambor de 2,2 metros. Esto hace que la aglomeración de material entre la tolva y el tambor sea cosa del pasado, por lo que la Cribus tiene un mayor rendimiento específico que sus competidoras.
AHORRE COSTES
Los usuarios profesionales suelen utilizar sus máquinas durante más de 1.000 horas. Esto hace que los costes de funcionamiento se conviertan rápidamente en un factor importante. Su accionamiento del tambor por rueda de fricción de bajo desgaste, un eficaz transportador de descarga de bordes ondulados para los finos, el accionamiento eléctrico de todos los componentes y mucho más hacen que la Cribus sea casi imbatible en costes de funcionamiento.
CAMBIO DE TAMBOR EN 5 MINUTOS
Basta con abatir la pared lateral para acceder libremente al tambor. Para cambiar el tambor, el operario sólo tiene que sacar la tolva del tambor, pulsar un botón para elevar el tambor y, a continuación, extraerlo con una carretilla elevadora o un polipasto.
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