La máquina ha sido concebida para el pintado racional de piezas pequeñas. Al contrario que las instalaciones continuas, no ocupa apenas más espacio que un puesto de proyección manual. La maneja una sola persona y alcanza, con la mera actividad de carga, un mayor rendimiento de producción que un recubrimiento a mano convencional.
El mando del KFS simplifica la introducción de los valores deseados para la zona de proyección, las velocidades de trabajo y las variantes de conexión de los aparatos para pintura al duco. Las entradas específicas de las piezas pueden almacenarse como programa global y, en caso de seleccionarse, vuelven a activarse de forma inmediata como programa de producción.
Existe la posibilidad opcional de acceder a coordenadas aisladas, junto con un eje portante del aparato igualmente accesible. El filtrado de la niebla de pintura se produce en el modelo como aspiración en seco, a través de un carro filtrante móvil, o como lavado en húmedo en el modelo de acero fino.