En los sistemas de desulfuración de gases de combustión húmedos, la piedra caliza (carbonato de calcio) se muele hasta convertirse en polvo en un molino de bolas húmedo. Los ciclones de Krebs se utilizan para clasificar la descarga del molino de bolas, devolviendo las partículas gruesas al molino de bolas para su posterior molienda. La piedra caliza finamente molida (típicamente 90% pasando 45 micrones) se reporta al desbordamiento del ciclón y se almacena en un tanque de almacenamiento de lodo de piedra caliza (a 25-30% de sólidos por peso).
La lechada de piedra caliza almacenada se rocía contra corriente contra el gas de combustión de la caldera de la central eléctrica, absorbiendo SO2 del gas de combustión. El SO2 reacciona con el oxígeno y la piedra caliza formando yeso. Los ciclones de Krebs concentran la lechada de yeso desde aproximadamente 15% de sólidos por peso hasta 45% de sólidos por peso antes de un filtro de banda de vacío. El filtro de banda de vacío produce una torta de filtro que puede ser desechada en un vertedero o, en algunos casos, procesada para fabricar paneles de pared. El desbordamiento del ciclón se devuelve al absorbedor donde la piedra caliza fina no reaccionada se convierte en yeso y los cristales finos de yeso se hacen más grandes.
Con frecuencia, los ciclones de diámetro pequeño se utilizan para procesar una porción del desbordamiento de los ciclones de desagüe de yeso. El propósito de esta etapa de ciclones es producir una corriente relativamente libre de sólidos (<1.5% de sólidos por peso) que puede ser enviada a una planta de tratamiento de aguas residuales como un purgador de cloruro del sistema.
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