Estos sensores de termopar se deben utilizar para controlar la temperatura de las pastillas de freno de hasta +400 oC. Están diseñados para ser incrustados en las almohadillas.
Cada sensor tiene 1m de cable aislado de fibra de vidrio, con overbraid de acero inoxidable. Disponible en termopar tipo K o J y con una selección de diámetros de punta. Cada punta está sellada con una pasta cerámica de alta temperatura (Fortafix) que puede soportar temperaturas de hasta +400 oC.