El material de alimentación del esferonizador puede ser partículas extruidas o gránulos húmedos de una mezcladora/granuladora. Dado que una partícula extruida tiene al menos dos dimensiones ya definidas, es posible una distribución de tamaño de partícula final estrecha.
Las partículas se introducen en la placa de fricción giratoria, que las lanza contra la pared interior del cilindro. Las partículas extruidas se dividen rápidamente en segmentos de aproximadamente un diámetro de largo. Las fuerzas centrífugas y gravitacionales crean un anillo de partículas mecánicamente fluidizado. Las colisiones con la pared, la placa de fricción y otras partículas provocan la deformación plástica de cada gránulo, creando rápidamente una forma esférica. La forma deseada para una aplicación específica depende del tiempo y de la formulación y se consigue, de forma predecible y repetida, en un breve período llamado "tiempo de esferonización".
Produce una superficie de partículas lisa adecuada para el revestimiento de capas finas
Formación de gránulos con una forma específica de bioconsumo
Acondicionamiento de partículas para evitar la generación de polvo y finos por el uso o el transporte
Aumento de la fluidez mediante la eliminación de los puntos de adherencia o de puenteado
Aumento de la densidad aparente del material a granel hasta un 25% en comparación con el material extruido
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