Tener información de las propiedades termo físicas de los materiales y la optimización de transferencia de calor de los productos finales es cada vez más vital para las aplicaciones industriales. Durante las últimas décadas, el método de flash se ha convertido en la técnica más utilizada para medir la difusividad térmica y conductividad térmica de diversos tipos de sólidos, polvos y líquidos.
El Linseis LFA 500 Light Flash ofrece un método rentable que determina la difusividad térmica, conductividad térmica y valores específicos de calor de hasta 18 muestras al mismo tiempo.
Principio:
La muestra se coloca en un robot de muestras, que se encuentra en un horno. El horno se mantiene a una temperatura predeterminada. A esta temperatura, la parte inferior de la muestra se irradia a continuación con un pulso de energía programado (lámpara de flash de xenón). El resultado de este pulso de energía es un aumento de temperatura homogénea en la parte superior de la muestra. El aumento de temperatura resultante en la superficie superior de la muestra se mide mediante un detector de infrarrojos de alta velocidad y los valores de difusividad térmica se calculan a partir del aumento de la temperatura en comparación con los datos de tiempo.