La espuma de embalaje de protección es una solución de embalaje única que se utiliza para mercancías delicadas, frágiles y de gran valor.
La primera solución consiste en adaptar la espuma de poliuretano a la forma exacta del producto envasado siguiendo todos sus contornos y detalles. Para ello, se hace un molde de madera. En el molde se coloca una bolsa a través de la cual se inyecta la espuma y adopta la forma del molde. Este tipo de espuma expansible protectora es extremadamente ligera y resistente a los impactos, lo que garantiza una barrera de protección personalizada de alta calidad.
La segunda solución es utilizar las bolsas de embalaje de espuma. El operario puede seleccionar un tamaño de bolsa en función de las necesidades de embalaje y llenarla de espuma. La coloca dentro de la caja, debajo del producto, y la espuma se expandirá y rellenará todos los espacios vacíos. La segunda bolsa se coloca encima del producto, inmediatamente después de la inyección, y se cierra la caja, obligando a la espuma a envolver el producto en una capa protectora.
La tercera solución consiste en utilizar las bolsas de espuma instantánea precargadas. Son una buena solución cuando se trata de entregas ocasionales de mercancías sensibles y de gran valor. La ventaja es que pueden utilizarse in situ, sin necesidad de una máquina especial o una pistola de espuma. Como fijan los objetos sin necesidad de rellenar los espacios vacíos del interior de la caja, las bolsas de espuma instantáneas son muy económicas. Están disponibles en muchos modelos para distintos tamaños de caja.
No importa si hablamos de espuma expandible personalizada, modular o instantánea, todas garantizan una protección superior, resistencia al impacto, adaptabilidad a cualquier tipo de producto
---