1. Aplicación: La dimetilformamida (DMF) es una importante materia prima química y un excelente disolvente que se utiliza principalmente en resinas de poliuretano, cuero de poliuretano, fibras acrílicas, productos farmacéuticos, pesticidas, tintes, limpieza de piezas electrónicas y otras industrias.
2. Indicaciones de peligro: Líquido y vapor inflamables. Nocivo por ingestión. Nocivo en contacto con la piel. Provoca irritación cutánea leve. Provoca irritación ocular grave. Puede perjudicar a la fertilidad o al feto. Provoca daños en los órganos (boca, hígado, riñones). Provoca daños en los órganos tras exposiciones prolongadas o repetidas (inhalación, hígado).
3. Descripción de los primeros auxilios necesarios
En caso de inhalación: Si se inhala, trasladar a la persona al aire fresco. Si no respira, dar respiración artificial. Consultar a un médico.
En caso de contacto con la piel Lavar con jabón y agua abundante. Consultar a un médico.
En caso de contacto con los ojos: Aclarar con abundante agua durante al menos 15 minutos y consultar al médico.
En caso de ingestión: No administrar nunca nada por vía oral a una persona inconsciente. Enjuagar la boca con agua. Consultar al médico.
4. Almacenamiento y manipulación: Almacenar en lugar bien ventilado. Manténgase fresco. Almacenar bajo llave. Almacenaren los envases originales en un lugar ignífugo autorizado. No fumar, luces desnudas, calor o fuentes de ignición. Almacenar alejado de materiales incompatibles en un lugar fresco, seco y bien ventilado. Proteger los recipientes contra daños físicos y comprobar periódicamente que no haya fugas.
5. Medidas de lucha contra incendios: Utilizar espuma, polvo químico seco, dióxido de carbono, agua pulverizada o nebulizada. Peligros especiales derivados del producto químico: El líquido y el vapor son inflamables. Peligro de incendio moderado cuando se expone al calor o a las llamas.
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