Las pruebas de carga tienen como objetivo principal comparar las flechas experimentales obtenidas durante la fase de prueba y las flechas teóricas del proyecto, con el fin de evaluar el perfil de deformación del elemento ensayado. Las cargas de prueba utilizadas pueden ser distribuidas (ladrillos, bloques o sacos de cemento, depósitos de agua) o concentradas similares (gatos hidráulicos). Los ensayos que utilizan cargas concentradas similares pueden ser del tipo de ensayo de tracción o de empuje. El resultado de los ensayos de carga y el comportamiento elástico de la estructura se representa mediante gráficos carga/desplazamiento y curvas de histéresis. La medición de los desplazamientos y deformaciones puede realizarse con sistemas manuales, como comparadores mecánicos o deflectómetros, o con sistemas automático-eléctricos, como transductores de movimiento (resistivos, inductivos, potenciométricos). El uso de estos sistemas eléctricos permite obtener lecturas continuas, estables y precisas que pueden transmitirse incluso lejos de la zona de ensayo correspondiente. Rapidez de ejecución, precisión y seguridad hacen de este sistema el más difundido hoy en día, en el sector de pruebas y ensayos.
Estribo de soporte para sensores de tipo muelle precargado para pruebas de carga
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