Briquetadora de viruta metálica BTT75
de polvo de amoladuraautomática

Briquetadora de viruta metálica - BTT75 - MACKMA - de polvo de amoladura / automática
Briquetadora de viruta metálica - BTT75 - MACKMA - de polvo de amoladura / automática
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Características

Especificaciones
de polvo de amoladura, de viruta metálica
Otras características
automática

Descripción

Explora las máquinas briquetadoras para virutas metálicas de la Línea BTT de Mackma, diseñadas para la compactación a 1000 kg/cm². Ofrecemos soluciones avanzadas para optimizar la gestión de residuos metálicos en procesos industriales. Compactación de Virutas Metálicas Una Máquina Compacta La briquetadora Mackma BTT50 es la máquina más compacta de su categoría, con toda la tecnología posible en dimensiones de 80×120 cm. La altura puede ajustarse, de 110 cm estándar a 60 cm o más, según las necesidades del cliente. La máquina comprime la viruta reduciendo el volumen hasta un 90% con una potencia de 1000 Kg por cm² y extrae el 98% del líquido presente en la viruta. Incluye un tanque de recogida de líquido de 50 litros, un flotador y una bomba que envía automáticamente el líquido al centro de trabajo. Descubre los Modelos de Máquinas Briquetadoras Basado en la cantidad horaria de material que necesitas briquetar, descubre el modelo adecuado de máquina briquetadora. Ten en cuenta que todas las máquinas de la Línea BTT prensan a 1000 Kg por cm² y su ciclo de producción varía de 3 a 5 briquetas por minuto, dependiendo de los tiempos configurados en el control. La diferencia en la cantidad horaria depende del peso específico del material, las configuraciones de la briqueta (diámetro x altura) y los tiempos establecidos en el control de la máquina. 90-100 Kg/h Aluminio 180-200 Kg/h Hierro 230-260 Kg/h Cobre 280-300 Kg/h Fundición 180-200 Kg/h Acero 290-350 Kg/h Latón

Catálogos

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* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.