Matcavi fabrica sus cables de carga con las tecnologías de producción más avanzadas y los somete a los más estrictos controles de calidad para garantizar la máxima fiabilidad y seguridad.
Nuestros cables de carga se fabrican pasando por varias fases de fabricación consecutivas, cuidadosamente supervisadas y verificadas paso a paso.
Todas las conexiones se comprueban mediante micrografías y mediciones precisas, para garantizar siempre la máxima seguridad y la menor resistencia de contacto posible.
El ensamblaje se lleva a cabo utilizando instalaciones y equipos de última generación, para asegurar el mejor resultado posible también en términos de repetibilidad.
Cada cable de carga se comprueba individualmente en un banco de pruebas totalmente automatizado. Desde la identificación del tipo de cable, pasando por las pruebas de seguridad exigidas por la norma CEI EN 62196, hasta una prueba de calentamiento única desarrollada por los ingenieros de Matcavi, que garantiza una conexión perfecta y una fiabilidad absoluta. Sólo después de un resultado positivo, el cable de carga es etiquetado y empaquetado.
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