En las rejillas electrosoldadas no es posible llevar a cabo luces de malla muy reducidas debido a imperativos técnicos. Cuando el cliente desee emplear rejillas electrosoldadas y al mismo tiempo quiera descartar la caída de partículas de determinado tamaño, esta rejilla es la opción que debe aplicarse. Soldando entre las pletinas portantes tiras de chapa punzada con una abertura de máx. 8 mm se logra, mediante un coste asumible, una rejilla de malla muy estrecha. Esta rejilla cumple con la norma española n.º 486/1997 (BOE de 23 de abril de 1997, n.º 97/1997).