La serie iQ-R de MELSEC dispone de una amplia gama de controlador lógicos programables para gestionar muchas tareas diferentes en la tecnología de automatización.
La arquitectura multi-CPU ha sido mejorada y permite un intercambio rápido de datos mediante el backplane de la unidad base.
Las CPUs disponen de numerosas funciones integradas, con la que es posible ejecutar un amplio espectro de tareas de control. Un puerto USB y una conexión de Ethernet son parte del equipamiento estándar.
La CPU motion permite diferentes funciones de control de movimientos, como posicionamiento, velocidad, par de giro, sincronización ampliada, etc.
Los módulos de CPU de procesos son parte del rango específico de aplicación de la serie iQ-R de MELSEC y tiene cuatro CPUs disponibles con capacidades de memoria entre 80 k y 1200 k pasos. Han sido diseñados especialmente para aplicaciones entre medianas y grandes, en la tecnología de procesos, en las que resulta especialmente importante un procesamiento de los datos a alta velocidad y el tratamiento de regulaciones PID muy complejas.